Redacción BLes– La asesora del gobierno de Reino Unido, Allegra Stratton, renunció a su cargo tras filtrarse un video en el que hacía bromas sobre una fiesta de navidad celebrada el año pasado, mientras la población sufría por el encierro de la cuarentena a causa del Covid-19.
A pesar de que los funcionarios han negado la realización de la fiesta, contactos de la BBC confirmaron que sí había tenido lugar el 18 de diciembre del 2020, y en ella participaron: “varias docenas” de personas, de acuerdo con publicación del 8 de diciembre.
La indignación del público se reflejó en una encuesta en la que se evidencia que la mayoría de los ciudadanos cree que sí ocurrió. Inclusive, una enfermera de UCI comentó: “Mientras ellos estaban de fiesta, yo cuidaba de gente que se estaba muriendo”.
En el video obtenido por ITV se ve a Stratton mientras prepara una rueda de prensa burlándose al contar: “Esa fiesta fue una reunión de negocios ficticia, y no hubo distanciamiento social”.
El disgusto no solo se manifestó entre los ciudadanos, sino también entre los políticos, principalmente entre los diputados conservadores, destacándose Sir Roger Gale quien dijo: “la responsabilidad recae en la cúpula”.
También exigió explicaciones al primer ministro británico, Boris Johnson. Por su parte, la expresidenta de los conservadores, la baronesa Warsi, presionó para que todos los funcionarios que asistieron a la fiesta renunciaran “sin peros”.
En este sentido, el líder laborista Keir Starmer dijo que Johnson tenía que dar respuestas sobre el escándalo: “Mentir y reírse de esas mentiras es vergonzoso. El primer ministro tiene que confesar y pedir disculpas”, expresó en un comunicado.
De hecho, Johnson ofreció disculpas y anunció que se haría una investigación y “se tomarán medidas disciplinarias contra todos los implicados”.
Es de recordar que en ese contexto de la pandemia el gobierno prohibía celebrar fiestas de Navidad, y no se podían celebrar reuniones de trabajo en Londres entre dos o más personas en el interior a menos que fueran “razonablemente necesarias”.
La rigidez del encierro por cuarentena significaba que muchos británicos no podrían ver a sus familiares durante la navidad ni para el año nuevo.
Stratton finalmente manifestó su arrepentimiento y anunció la renuncia: “A todos los que perdieron a sus seres queridos, soportaron una soledad intolerable y lucharon con sus negocios: lo siento y esta tarde he presentado mi dimisión al primer ministro”.
Este caso en el que los políticos y los funcionarios se eximen a sí mismos de las normas que establecen para sus votantes se ha repetido en muchas ocasiones, en diferentes países.
En Estados Unidos los casos han sido frecuentes involucrando desde el presidente, Joe Biden, y la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, y pasando por la alcaldesa del Distrito de Columbia, Muriel Bowser.
Cuando Muriel acababa de restablecer la obligación de utilizar mascarillas en interiores en Washington, DC, por la amenaza de las contaminaciones con el Covid en julio, pero ofició una boda con cientos de asistentes sin máscara, informó el Washington Examiner.
José Hermosa – BLes.com
