Redacción BLes– Alegando desventajas competitivas e inseguridad hacia las mujeres, la medallista olímpica australiana, Jane Flemming, sostiene y solicita a las autoridades deportivas que no se permita la participación de mujeres trans en las competencias femeninas.
Jane Flemming, nacida en Australia, es una atleta olímpica de 55 años ya retirada de la competición. Recientemente, según informó Neonnettle, manifestó su preocupación respecto a que los atletas transgéneros participen en competencias de deportes femeninos, argumentando un peligro inminente sobre las mujeres, además de una notoria e injusta desventaja competitiva.
El debate ya está instalado y Flemming no dudó en ponerse del lado de los que defienden, sin hacer juicio de valor sobre las elecciones personales de cada ser, que aquellas personas que se identifican como mujeres, pero biológicamente nacieron como hombres, no debieran poder participar en competencias deportivas junto con mujeres.
Si bien el argumento que utilizan los que defienden la postura planteada por Flemming, es completamente razonable y difícil de refutar desde la lógica, la realidad es que la legislación en Australia, concretamente la Ley federal contra la discriminación sexual, interpreta como discriminación, por motivos de género o identidad de género, el acto de excluir de una competencia a un participante por su sexualidad.
En una entrevista que dio a ABC, Flemming aseguró: “La diferencia es que para aquellos que han nacido como hombres biológicos, si pasan por la pubertad en particular, tienen, absolutamente, algunas ventajas fisiológicas”.
Y agregó: “Ya sea que se trate de fuerza ósea o mayor masa muscular, también hay otros aspectos, no solo afecta el rendimiento sino que hay un aspecto de salud o de peligro”.
Lamentablemente, los defensores de la igualdad de género, al no encontrar fundamentos lógicos y racionales para hacer frente a los argumentos defendidos por Jane Flemming y los que siguen su línea de pensamiento, suelen intentar desprestigiarlos acusándolos de homofóbicos e intolerantes a lo diferente, cuando la problemática se plantea desde el ámbito deportivo y no del ideológico.
En Estados Unidos, donde también se está llevando a cabo esta discusión, los senadores republicanos Kelly Loeffler, Mike Lee, Marsha Blackburn, Tom Cotton y James Lankford, se unieron para presentar un proyecto de ley que apunta a retirar fondos de cualquier escuela que permita la participación de mujeres trans en competencias deportivas femeninas.
Tal como reportó el Washington Examiner, la senadora que impulsó originalmente la legislación es Kelly Loeffler. Según los dichos de la senadora, la legislación es necesaria para garantizar que las mujeres tengan igualdad de acceso a las oportunidades deportivas.
Según el proyecto de ley presentado, se propone acordar que a la hora de aceptar la participación de los atletas en las competencias deportivas escolares, la determinación del sexo de mujeres y niñas sea exclusivamente a partir de la biología reproductiva y genética de la persona al nacer. Además, las escuelas que permitan a las mujeres trans competir contra mujeres y niñas en los deportes, estarían en peligro de perder fondos federales.
El senador Lee, también partícipe del proyecto, dijo: “Los hombres y las mujeres son biológicamente diferentes. Eso es un hecho científico. Por la seguridad de las atletas femeninas y por la integridad de los deportes femeninos, debemos respetar esas diferencias en un campo de competencia justo”.
Andrés Vacca – BLes.com