Redacción BLes– Estados Unidos realizó fuertes acusaciones contra China al afirmar que el régimen comunista tiene claras intenciones de “conquistar” la luna como parte de un “programa espacial militar”.
Ambas potencias se enredaron en una batalla verbal por el asunto de la “conquista del espacio”, lo que inevitablemente recuerda a la disputa por la carrera en llegar a la luna entre Estados Unidos y la antigua Unión Soviética durante los años de la Guerra Fría.
“Hay una nueva carrera hacia el espacio, esta vez con China”, dijo al periódico alemán Bild el director de la NASA, Bill Nelson.
Mientras la NASA viene anunciando que espera en 2025 llevar a cabo una nueva visita tripulada a la luna, surgen cada vez más versiones que las intenciones de Beijing van mucho más allá y entre sus planes espaciales se encuentra la intención de crear una base militar en la luna y adquirir soberanía en el satélite natural más cercano al planeta tierra.
“Deberíamos estar muy preocupados de que China esté aterrizando en la luna y afirme: ahora es nuestra y tú quédate fuera”, advirtió Nelson durante la entrevista.
Paralelamente el funcionario también reveló que los astronautas chinos son frecuentemente entrenados para destruir satélites de otros países y que el aparato de inteligencia del régimen ha robado ideas y tecnología de otros países para sacar ventajas en sus proyectos espaciales.
Según manifestó Nelson, las autoridades de Beijing llevan varios años desarrollando tecnología con el objetivo de “atrapar” satélites con brazos robóticos, sujetarlos con poderosas redes o incluso destruirlos. La excusa del régimen para desarrollar estas tecnologías es que les permitiría poder “limpiar” su propia basura espacial, pero las acusaciones indican que el propósito final es sacar de circulación a satélites de otros países.
El régimen chino busca dominar el espacio
Cuando a comienzos de este año el régimen chino anunció su plan para llevar adelante más de 40 lanzamientos al espacio durante el 2022, estaba confirmando sus intenciones de llevar a cabo una verdadera carrera espacial en la que pretende superar a países líderes como Estados Unidos.
Mientras tanto China, continúa construyendo su propia estación espacial sin dar mayores detalles a la comunidad internacional sobre los objetivos que planea explorar y el alcance de los mismos. Por el momento la estación posee un módulo en funcionamiento donde ya habitan tres astronautas de modo permanente.
Entre los lanzamientos previstos para este año China espera poder adjuntar por lo menos dos módulos más con un peso aproximado de 66 toneladas, lo que equivale a una cuarta parte de la Estación Espacial Internacional (ISS, por sus siglas en inglés).
La estación espacial china se está desarrollando en la órbita terrestre con el nombre de Tiangong, que significa “lugar celestial”. El primer módulo se llamó Tianhe y fue lanzado en mayo de 2021. A finales de este año esperan terminar su construcción.
La estación espacial china podría funcionar como un trampolín a su objetivo más ambicioso que es formar junto con Rusia, una estación espacial en la luna. El régimen chino y el gobierno ruso prometieron una mayor cooperación espacial a principios de febrero como parte de una asociación ‘sin límites’ cuando el presidente Putin visitó al presidente Xi Jinping en Beijing poco antes de que Rusia invadiera Ucrania.
Muchos expertos en seguridad han advertido que el programa espacial del régimen chino es una amenaza militar directa para Estados Unidos y el mundo.
En diciembre de 2021 el general David Thompson, vicejefe de operaciones espaciales de la Fuerza Espacial de Estados Unidos, hizo sonar las alarmas cuando declaró públicamente que China está desarrollando sus capacidades espaciales al “doble de velocidad” que Estados Unidos.
“El hecho de que, en promedio, están construyendo, implementando y actualizando sus capacidades espaciales al doble de la velocidad que tenemos, significa que muy pronto, si no comenzamos a acelerar nuestras capacidades de desarrollo y entrega, nos superarán”, dijo el general Thompson, y agregó: “2030 no es una estimación irrazonable”.
El representante Jim Cooper se unió a las palabras de Thompson y destacó que la industria privada de los Estados Unidos pareciera estar mucho más comprometida con la carrera espacial contra China que la propia Fuerza Aérea de los Estados Unidos.
Si bien reconoció que el gobierno federal está invirtiendo mucho dinero en la Fuerza Espacial, advirtió que no es suficiente para afrontar un tema tan delicado y sugirió que se deben concentrar esfuerzos para superar la imaginación y la inversión de multimillonarios como Elon Musk y Jeff Bezos.
La OTAN advierte sobre posibles ataques espaciales
La órbita terrestre ha dejado de ser un simple espacio de misterio y destinado a la investigación. Durante las últimas décadas cientos de satélites han sido enviados y comprenden un elemento clave del funcionamiento de todos los sistemas tecnológicos del planeta Tierra.
Todo lo que sucede en internet, las comunicaciones telefónicas, los sistemas de seguridad, sistemas financieros y tantas otras cuestiones del normal funcionamiento de nuestra vida diaria dependen de estos satélites que giran alrededor de la Tierra.
Teniendo esto en cuenta es que organizaciones y líderes mundiales han manifestado su preocupación por la falta de normativas que existen en la órbita terrestre y la vulnerabilidad allí existente en materia de seguridad.
La Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) ha tomado acción al respecto, y publicó el 17 de enero una serie de medidas que definen su “política espacial general”, la cual está destinada a proteger a sus miembros de posibles ataques espaciales, citando amenazas concretas que podrían generar grandes catástrofes.
El documento publicado de forma oficial por los aliados de la OTAN indica que sus principios de defensa colectiva desde a partir de ahora ya no se limitaran al plano terrestre, los mismos se extenderán también al espacio exterior, en respuesta a una serie de amenazas detectadas que podrían tener un gran impacto en la sociedad.
El Comando Espacial del Reino Unido, uno de los principales aliados de la OTAN, expresó su apoyo a la política a través de un comunicado en Twitter: “El espacio es un dominio congestionado y competitivo que es cada vez más importante para las actividades civiles y militares”.
Space is a congested & competitive domain which is increasingly important for civilian and military activities
Today @NATO has released its space policy. It outlines how the Alliance plans to defend Allied interests in space
🔗Read the policy here: https://t.co/98AAX6qzE9 https://t.co/fbEWutARxx
— UK Delegation to NATO (@UKNATO) January 17, 2022
Actualmente alrededor de dos mil satélites orbitan la tierra, y más de la mitad de estos fueron lanzados y son operados por miembros de la OTAN.
Si bien la OTAN no nombró específicamente a China, se sobreentiende que parte de la preocupación es justamente por el rápido crecimiento del régimen chino en materia espacial y sus antecedentes de robo de información y su intención explícita de competir con Estados Unidos por el liderazgo mundial, y ahora también, espacial.
Como era de esperar, las autoridades del régimen comunista desmintieron las acusaciones realizadas por agrupaciones y funcionarios durante el último tiempo, incluyendo la reciente denuncia realizada por Bill Nelson, director de la NASA. Argumentando que sus incursiones en el espacio son completamente pacíficas y con el único objetivo de generar conocimiento.
Andrés Vacca – Redacción BLes