Redacción BLes– Los padres del pistolero del instituto de Michigan, Ethan Crumbley, habían tenido problemas legales en múltiples ocasiones antes del tiroteo de su hijo el 30 de noviembre.
Según los documentos judiciales, James y Jennifer Crumbley ya se han visto envueltos en problemas legales, incluyendo la conducción bajo la influencia de drogas en Florida. En relación con el crimen de su hijo, ambos se enfrentan a acusaciones de homicidio involuntario el viernes 3 de diciembre.
El 12 de febrero de 2005, James y Jennifer Crumbley fueron acusados de conducir bajo los efectos del alcohol, pero no se declararon culpables. Según los archivos de Internet del condado de Duval, Florida, se les impuso una multa de 652 dólares a cada uno.
Jennifer fue sospechosa en 2003 de crear un cheque de 150 dólares que no tenía ningún valor. El caso fue posteriormente desestimado como un delito menor. Según la denuncia, fue declarada culpable de la misma conducta en 2004 y multada con 240 dólares.
El Departamento de Policía de Atlantic Beach también incautó el vehículo de James por conducir con el permiso suspendido y con una matrícula incorrecta. Pagó una multa de más de 200 dólares.
James “trabajó brevemente… como contratista independiente de febrero a julio de 2021” y “fue despedido por razones no relacionadas” con el tiroteo de su hijo, según un representante de la empresa con sede en San Francisco donde su padre trabajó por última vez.
James también tenía problemas legales por no pagar la manutención a su ex mujer, con la que tiene un hijo de 18 años, Eli, según el News York Post.
Según el jefe de policía Michael Bouchard, James compró la pistola Sig Sauer de 9 mm utilizada en el tiroteo cuatro días antes del Black Friday.
Ethan, de 15 años, se enfrenta a cargos de asesinato en primer grado, terrorismo, asesinato con intención de matar y 12 cargos de posesión de armas de fuego como adulto. Al parecer, el martes 30 de noviembre disparó y mató a cuatro estudiantes en el instituto de Oxford e hirió a otros siete.
Los padres de Ethan Crumbley supuestamente le dieron instrucciones de no cooperar con los investigadores después de su detención. El sheriff Mike McCabe declaró que la policía debe obtener el permiso de los padres o tutores del menor antes de hablar con él.
Amy Laurence – BLes.com
