Redacción BLes – Según Fox News, el presidente Joe Biden se reunió en línea con varios gobernadores republicanos el lunes 27 de diciembre para discutir los esfuerzos en curso para combatir el creciente número de casos de COVID-19 causados por la nueva cepa ómicron.
Durante la conferencia con varios gobernadores del país, Biden declaró: “No hay una solución federal. Esto se resuelve a nivel estatal”.
Estas declaraciones son una de las admisiones vitales hasta la fecha del gobierno de Biden de que necesitará la ayuda de los gobiernos locales y estatales para combatir el Covid-19.
Es posible que al presidente le preocupe que, sin el apoyo de los estados, los esfuerzos del gobierno para limitar el virus puedan fracasar. Las declaraciones podrían ser también un intento de aumentar la presión sobre los gobernadores para que adopten un papel más activo en la lucha contra la enfermedad.
Los comentarios se producen en un momento en que la Administración de Seguridad y Salud en el Trabajo y los Centros de Servicios de Medicare y Medicaid han intentado emitir órdenes federales de gran alcance para mitigar la pandemia, incluyendo requisitos de demanda de tratamiento por parte de los empleadores.
Según Fox, es posible que el Tribunal Supremo vea pronto una apelación a la norma de la OSHA que obliga a las empresas privadas con más de 100 empleados a vacunarse o a someterse a pruebas periódicas.
El gobernador de Arkansas, Asa Hutchinson, jefe de la Asociación Nacional de Gobernadores, pidió a Biden que asistiera a la conferencia del lunes, “para no dejar que las soluciones federales se interpongan en el camino de las soluciones estatales”. “Mire, no hay una solución federal”, aceptó el presidente cuando llegó el momento de su intervención. “Esto se resuelve a nivel estatal … y en última instancia se reduce a donde el caucho se encuentra con el camino y eso es donde el paciente está en necesidad de ayuda, o la prevención de la necesidad de ayuda”.
La administración tiene la intención de proporcionar pruebas gratuitas a todos los estadounidenses, apoyar más lugares de vacunación y pruebas, y enviar 1.000 militares a los hospitales de todo el país.
El gobierno de Biden lleva semanas instando a los estadounidenses a tomar precauciones adicionales durante las fiestas de 2021 para proteger a sus familias de la propagación de la enfermedad.
Los comentarios del presidente se produjeron cuando el número de casos de Covid-19 aumentó durante el fin de semana de las fiestas navideñas.
A lo largo de la última semana, la variante omicron altamente infecciosa ha provocado más casos de coronavirus en varios estados, incluidos Nueva Jersey y Nueva York, que en cualquier otro periodo de siete días a lo largo de la epidemia.
Aunque los primeros indicios sugieren que la variante puede causar síntomas más leves, los expertos sanitarios aconsejan tomar rigurosas precauciones de seguridad pública, advirtiendo que la rápida propagación de la variante podría poner a prueba el sistema médico estadounidense y provocar más muertes.
Durante una reunión virtual con los gobernadores de los estados, Biden dijo: “Hemos pasado de no tener pruebas de venta libre en enero a 46 millones en octubre, 100 millones en noviembre y casi 200 millones en diciembre. Eso no es suficiente. Está claro que no es suficiente. Si… lo hubiéramos sabido, habríamos ido más lejos, más rápido si hubiéramos podido”.
Según Biden, la variante ómicron es una “fuente de preocupación”, pero no “una fuente de pánico”.
Charlotte Thorne – BLes.com
