El abogado penalista Francisco Bernate explicó en entrevista con PanAm Post que EEUU podría solicitar a la exsenadora colombiana “si considera que pudo participar de alguna forma” en el caso de Álex Saab por medio de un acuerdo de voluntades.
La exsenadora colombiana y de nuevo aspirante a la Cámara alta, por la misma coalición que respalda a Gustavo Petro para la presidencia, está frente a un escenario complicado. La rodean señalamientos por supuestos vínculos con el empresario colombiano Álex Saab y su hermano fue capturado en febrero pasado por presunto narcotráfico, además de otras polémicas.
Una hipótesis que surge, es la posibilidad de extradición de Piedad Córdoba hacia Estados Unidos para que rinda cuentas por actividades ilícitas relacionadas con Saab, señalado como testaferro de Maduro. El análisis surgió en el programa Secretos de Darcy transmitido por la emisora colombiana La FM y conducido por la periodista Darcy Quinn. «Es una posibilidad y el gobierno colombiano es consciente de que esta petición podría llegar en cualquier momento», citó el portal web de dicho medio de comunicación.
Puede que exista un largo trecho hasta que un pedido de EE. UU. de esa naturaleza se concrete. Depende de la justicia norteamericana. Francisco Bernate, presidente del Colegio de Abogados Penalistas de Colombia dijo en entrevista con PanAm Post que coincide con que el panorama legal para la exsenadora colombiana «no es el mejor» y la extradición no se trata de una idea absurda. No solo por la relación de Córdoba con Saab, sino por la reciente noticia sobre una supuesta injerencia en la liberación de rehenes de las FARC. A continuación, ahondaremos en los motivos que podrían detonar tal pedido.
El entramado de Álex Saab
La Asamblea Nacional de Ecuador ecuatoriano sacó a la luz una comprometedora investigación que evidencia detalles de los movimientos de Álex Saab con políticos como Juan Manuel Santos, Rafael Correa y la exsenadora. Este informe fue el que contribuyó a que la Corte Suprema de Colombia la citara con el fin de declarar en calidad de versión libre y explicar dichos nexos. Pero Piedad Córdoba no asistió. Argumentó motivos personales y dijo que no asistirá en el futuro, según una comunicación citada por Infobae.
Piedad Córdoba no asistió a cita en la Corte Suprema para explicar su relación con Alex Saab https://t.co/2Cb4vEpEoA
— Infobae Colombia (@infobaecolombia) February 11, 2022
Sin embargo, no hay que olvidar que el caso del colombiano señalado como testaferro de Maduro ya está en manos de EE. UU. y desde allá está soltando datos cada vez más comprometedores. El abogado penalista explica que la extradición pudiera activarse «si EE. UU. considera que Álex Saab pudo estar incurso en acto de lavado de dinero y si la exsenadora pudo participar de alguna forma en ese proceso. Solo por el hecho de que existiese un acuerdo de voluntades (en EE. UU. se llama conspiración, en este caso para cometer un lavado de activos)».
Otra sería la historia si se determina que la participación fue mucho más activa para ocultar el origen ilícito del dinero, añade. Ahí, se atribuiría directamente el cargo de lavado de activos.
Dato nada desestimable. Según el abogado penalista, una persona puede ser extraditada aún cuando esté siendo investigada en Colombia. Esto se basa en mecanismos de cooperación internacionales. El acusado se puede seguir defendiendo y dando su versión de los hechos desde el país donde se encuentre.
Hermano preso por narcotráfico
La Policía colombiana detuvo con fines de extradición a Álvaro Fredy Córdoba Ruiz por delitos de narcotráfico y nexos con el grupo de las “disidencias” de las FARC que lidera alias ‘Gentil Duarte’ y carteles mexicanos. Un tribunal de Nueva York lo acusa por tráfico de más de cinco kilos de cocaína y porte de armas de fuego.
Córdoba escribió en Twitter que “ni mi hermano Álvaro Córdoba ni yo tenemos relación alguna con el narcotráfico ni con grupos armados”. Calificó la acción como un «montaje», lo mismo que ha dicho sobre señalamientos por presuntos vínculos con Álex Saab y con las FARC.
Se desconoce si EE. UU. ha detectado vínculos entre ambos hermanos en relación a actividades ilícitas. Pero sin duda constituye otro dolor de cabeza para la exsenadora izquierdista. De nuevo, dependerá de la justicia estadounidense comprobar algún tipo de relación y emitir alguna alerta en caso de que así sea.
Los rehenes de las FARC
Andrés Vásquez, el exasesor de comunicaciones de Piedad Córdoba, la acusó recientemente de pasar de ser «mediadora humanitaria» a lobista de Álex Saab. La exsenadora habría retrasado la liberación de varios rehenes de las FARC, entre ellos Ingrid Betancourt y a tres contratistas estadounidenses. El objetivo era favorecerse ella, al dictador Hugo Chávez y que Francia y Estados Unidos presionaran a Colombia para cambiar a los secuestrados por presos guerrilleros.
Es decir, sería una situación en la que una persona emplea un secuestro para tener un rédito político. «Eso hace que tenga una responsabilidad en ese hecho del secuestro porque es en últimas quien decide si se libera o no», explica Bernate.
«La justicia colombiana debe investigar a fondo porque es una grave infracción a los derechos humanos y al derecho internacional». En este sentido, al haber ciudadanos estadounidenses involucrados «si EE. UU. considera que debe proceder a la extradición de Piedad Córdoba, es igualmente viable».
Hay un «pero»…
Antes de pisar cualquier juzgado de EE. UU. o atravesar un proceso judicial a Colombia, Piedad Córdoba podría recurrir a la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) dado que allí hay una garantía de no extradición. «Esta podría ser la única alternativa», sugiere al abogado. Acogerse a la JEP no significa un salvoconducto o impunidad garantizada, pero sí habrían sanciones más benéficas.
«Son acusaciones serias», señala el experto respecto al panorama general para la senadora rumbo a las elecciones colombianas. «Más que castigarla electoralmente, el llamado es a que la justica colombiana actúe pronto de manera que no hayan lecturas políticas y menos cuando se trata de violaciones al derechos internacional humanitario», insistió en relación a la presunta injerencia para la liberación de rehenes.
Oriana Rivas – PanAm Post